Ayer tuvimos una jornada buena en lineas generales.
Por la mañana en Moya nuestros Infantiles empezaban bien aunque no conseguían abrir grandes brechas. En el tramo final del partido una exclusión nos hacía ponernos por debajo en el marcador, aunque una gran defensa nos permitió empatar el encuentro.
Más tarde le llegaba el turno a los cadetes que nunca tuvieron oposición en los norteños, de tal manera que Ángel y Puli daban entrada a los infantiles.
El último encuentro fue el más emocionante de todos, los chicos saltaban a la cancha con el firme propósito de demostrar a sus seguidores que lo ocurrido en el último partido fue un accidente. Desde el principio salieron metidos en el partido y fueron ganándolo siempre hasta las lesión de Aitor y Kévin que aprovecharon los locales para ponerse por encima con una ligera ventaja. El corazón de los bravos jugadores teldenses les hacía volver a la cancha y en la última jugada conseguían empatar ante uno de los mejores equipos de la categoría.
Por la noche llegaba la guinda al pastel con los de Primera. Tras empezar fuera del partido e ir perdiendo hasta de cuatro goles en casa contra un Ingenio bien plantado en un agresivo seis cero y con un Tyron intratable, los de Telde recortaban distancias para llegar al descanso un gol abajo en el electrónico. En la segunda parte Pipo cambió la defensa acertadamente y con un grandísimo Rayco que echó la cancela a su portería, el Jinabal conseguía rentas amplias. Esto posibilitó al técnico local el poder dar entrada a los menos habituales.
Después del partido la plantilla celebró un asadero como una gran familia, en La casa del Deporte de Las Remudas.
Desde este medio felicitamos a todos y les pedimos que continúen trabajando muy duro.
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